El hosting cloud es mejor que tener un servidor dedicado debido al nivel adicional de redundancia. Si tu máquina dedicada sufre un fallo de hardware, por ejemplo, tu sitio se cae y no hay una forma rápida de recuperar el servicio. Mientras en la nube, si una de las máquinas que forman parte del grupo falla, el resto se hará cargo y tu sitio no experimentará tiempo de inactividad.